Las grandes victorias son posibles
Esta carta es muy especial para mí, porque es la primera vez que tengo la fortuna de escribiros a todos los socios y las socias de Greenpeace desde que me convertí en la nueva directora ejecutiva.
Y lo hago, además, en un momento en el que la revista se reinventa pensando en todos vosotros y vosotras para darle más espacio a la imagen, potenciar la conexión con lo digital y apostar por más contenidos en profundidad.
En este número, que coincide con el inicio del verano, incluimos un especial sobre movilidad sostenible en el que también contamos por qué es tan necesario que las administraciones inviertan más en trenes y menos en aviones. Lo acompañamos de recomendaciones culturales, propuestas de acción con las que podéis implicaros en la campaña y la colaboración especial de nuestra primera firma invitada, la socióloga y urbanista Sara Ruiz Escalante.
En nuestra sección En imágenes, rescatamos instantáneas de la reciente expedición científica del Arctic Sunrise al Océano Índico para investigar los impactos ambientales y sociales de la pesca destructiva en alta mar, y pedir una vez más un tratado internacional que proteja los océanos, la base de la vida en nuestro planeta.
Me hace especial ilusión la sección Familia Greenpeace, que estrenamos con la entrevista a una de nuestras socias y voluntarias, Begoña Vila, promotora de una iniciativa maravillosa para enseñar a montar en bicicleta a mujeres, en alianza con el colectivo de Vigo Mulleres Bicivisíbeis.
Me hice socia de Greenpeace en 2002, con 25 años, y unos meses después me uní al equipo de activistas en una protesta para bloquear el vertido de residuos tóxicos al río Cinca. Lo que más me impresionó desde el principio, y aún hoy se me siguen poniendo los pelos de punta, es todo lo que Greenpeace puede hacer gracias al poder de la gente. A las ahora 143.394 personas socias, ni una más ni una menos, porque todas somos importantes.
La pandemia, desgraciadamente, sigue presente en nuestras vidas y nos recuerda cada día la urgencia de proteger la vida en el planeta. En estos tiempos difíciles, creer que las grandes victorias son posibles es imprescindible. Todas las personas que formáis Greenpeace sois especialistas en creer en el cambio, y creer es crear, así es que lo vamos a hacer juntas.
Gracias por ser Greenpeace.
Un abrazo grande,
Eva Saldaña, directora ejecutiva de Greenpeace