Transparencia y rendición de cuentas: Memoria 2020
Transparencia y rendición de cuentas
La transparencia y la rendición de cuentas han sido desde siempre una prioridad para Greenpeace, y es algo que cuidamos cada día porque sabemos de la importancia de compartir con nuestros socios, socias y donantes todo lo que conseguimos gracias a vuestro compromiso.
Cuando decimos que somos completamente independientes de cualquier empresa o gobierno, lo hacemos con el orgullo de saber que el 100% de nuestros fondos provienen de aportaciones individuales de personas que, con enorme generosidad y esfuerzo, deciden dar un paso adelante y contribuir al trabajo de Greenpeace.
Sin ese compromiso no podríamos alzar la voz con la libertad y contundencia con las que lo hacemos.
Por todo esto, porque nos tomamos muy en serio la rendición de cuentas, en Greenpeace nos sometemos de forma anual a tres sistemas de control, además del trabajo continuo del área de finanzas: una auditoría externa, realizada por una empresa independiente; un control interno, realizado desde la oficina internacional sobre el conjunto de las oficinas de Greenpeace; y un tercero, también interno, por parte de la Junta Directiva y el Consejo, formados por socias y socios. Un largo proceso que suele concluir a mediados de año y que os compartimos en este número de la Revista GPM.
Además, Greenpeace es signataria fundacional de la Carta de Responsabilidades de las Organizaciones No Gubernamentales Internacionales (ONGI), documento vinculante que obliga a cumplir normas de buenas prácticas sobre responsabilidad pública y transparencia, relativas a la buena gobernanza y a la gestión eficaz; la recaudación ética de fondos y el compromiso de múltiples partes interesadas, así como de los principios consagrados en la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Memoria 2020
2020 fue un año que nunca olvidaremos. La pandemia se cobró miles de víctimas en todo el mundo y dejó en situación de extrema vulnerabilidad a muchas más. Esta crisis sanitaria nos lanzó un mensaje rotundo: no podemos seguir ejerciendo más presión sobre la Tierra, necesitamos reinventar nuestro modelo económico y social para construir otro que se centre en el bienestar de las personas y del planeta.
El mundo cambió y los planes que teníamos a principios de año se vieron alterados, pero en Greenpeace no paramos. Era el momento de sumar fuerzas y sabíamos que contábamos con el apoyo de los socios y las socias: los de siempre y los que en 2020 dieron el paso de unirse a Greenpeace.
Por eso, lanzamos el primer litigio climático contra el gobierno por su inacción ante la crisis climática; denunciamos el greenwashing de muchas empresas, entre ellas ECOEMBES; pedimos reinventar las ciudades para poder vivir más y mejor; seguimos exigiendo la protección de los bosques y océanos y lanzamos el proyecto #Hablarural para cuidar de nuestros pueblos, entre muchas otras acciones sobre las que puedes encontrar más información en nuestra web.
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