Pagos por capacidad, otra mordida de las eléctricas

Mientras España ha penalizado a las energías limpias, las eléctricas siguen recibiendo ayudas por mantener centrales de energía contaminantes aunque no generen ni un solo vatio de energía. Un sistema

Qué es esto de los pagos por capacidad? En teoría, subvenciones concedidas a las grandes eléctricas para que sus centrales estén disponibles, generen o no electricidad. También un incentivo por sus inversiones desorbitadas durante los últimos años. En realidad, los pagos por capacidad son un capítulo más de la España que mantiene con lo público autopistas en quiebra, aeropuertos fantasmas e infraestructuras deficitarias.

¿Cómo se ha configurado un sistema eléctrico tan sobredimensionado? Ha sido otra burbuja. Desde finales de los 90 y sin planificación oficial que les obligase a ello, las compañías eléctricas han instalado centrales de gas de forma masiva. Esperaban otro “milagro español” y sus expectativas de crecimiento de la demanda fueron tan elevadas como irreales. En 2005 se llegó a construir una central eléctrica cada mes.

¿Qué ha pasado con todas esas centrales fantasma? Nunca alcanzarán los niveles de producción estimados. Aún así el Gobierno empezó a pagar en 2007 unas ayudas para resarcir las inversiones realizadas como ‘pagos por nuevas instalaciones’.

¿Necesitamos todas esas centrales de reserva? En absoluto. Según datos de Red Eléctrica Española (REE), las centrales de ciclos combinados funcionaron el año pasado al 16,7% de su capacidad total, y las centrales de carbón lo hicieron el 56,9% de las horas posibles.

Un momento. ¿Estamos pagando por infraestructuras que no se usan? Así es. Tenemos muchas más centrales eléctricas de las que necesitamos. Se han construido decenas de nuevas centrales sin cerrar la mayoría de las viejas. España es el país de la UE que más subvenciona con estos pagos a las centrales con energías sucias.

¿De dónde salen estas subvenciones? De la factura de la luz. En los últimos diez años hemos pagado por estas subvenciones más de 800 millones de euros al año de nuestra factura, que ya es de por sí de las más caras de Europa.

¿Nadie hace nada? La Comunidad Europea ha cuestionado este tipo de subvenciones al sector eléctrico y ha expedientado a España por otorgar desde 2007 unos 440 millones de euros a las centrales de carbón para reducir su impacto medioambiental y cumplir la ley de emisiones contaminantes.

¿Qué centrales y compañías eléctricas se han llevado estas subvenciones? Saber esto es una misión imposible, ya que son datos confidenciales. Gracias a la investigación realizada por la Comunidad Europea, Greenpeace ha descubierto que en los últimos años han recibido casi 18.000 millones de euros.

¿Qué se podría haber hecho con todo ese dinero? Por ejemplo, se podría haber cubierto el gasto de electricidad de los 1,5 millones de familias en situación de pobreza energética durante 15 años. También cabría imaginar si todo este dinero se hubiese invertido en un sistema inteligente que reconfigurase el panorama energético con energías renovables.

Texto: Carlos Risco