Protejamos el océano desde casa
Si comes pescado, apuesta por un pescado sostenible y compra de manera responsable. Además, ayúdanos a presionar a los Gobiernos para que aprueben un Tratado Global de los Océanos que regule las comunidades pesqueras.
También es esencial impedir que los plásticos lleguen al mar. Evita comprar bienes de un solo uso y consumir productos envasados. Recicla y reutiliza todo lo que puedas, porque cada gesto cuenta.
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Reduce tu consumo de pescado y, cuando lo compres, verifica que sea de temporada, de artes sostenibles y de caladeros lo más cercanos posible
Este pescado es más sabroso y mucho más sostenible. Si compras de esta manera, contribuirás
a evitar la sobreexplotación de los océanos.
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Mira bien la etiqueta
Un correcto etiquetado ofrece toda la información necesaria y permite elegir el pescado más sostenible. En el caso del pescado, tanto fresco como congelado, debe indicarse, entre otros detalles:
- Método de pesca: elige las artes más selectivas, como el pincho, el trasmallo, las nasas, el palangre no industrial, la caña, etc.
- Zona de captura: a veces, el pescado se descarga en puertos cercanos, pero viene de lejos. Comprueba que se haya capturado cerca; cuanto más, mejor.
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Si compras en supermercados, elige los que tengan una política sostenible de compra de productos pesqueros
Exige productos sostenibles, que apoyen a las comunidades pesqueras y que estén bien etiquetados, con información completa sobre su origen.
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En caso de consumir atún, infórmate muy bien
¿Sabes cuál ha sido su “viaje” hasta tu plato? El atún es uno de los pescados más consumidos y también uno de los más vulnerables. En tu supermercado, busca aquellos que hayan sido pescados con caña y lo más cerca posible.
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Penaliza la pesca insostenible
Si el etiquetado no está claro y la pescadería carece de la información sobre sus productos, no los compres. Ante la duda sobre su procedencia y sostenibilidad, es mejor no arriesgarse: en su origen, podría haber una práctica nociva para los océanos. En este vídeo, te contamos cómo comprar pescado de forma sostenible:
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Evita el pescado de acuicultura intensiva
La acuicultura no es la solución a la sobrepesca. Cerca de un tercio de la actividad pesquera mundial se dedica a la fabricación de harina de pescado para alimentar la cría en cautividad. Esta industria tiene otros impactos sociales y ambientales, entre ellos, la contaminación del agua, la introducción de especies invasoras y la ocupación de zonas costeras y marinas en detrimento de otras actividades, como la pesca tradicional. Opta por la acuicultura más tradicional (como el marisqueo) o por especies herbívoras y autóctonas.
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Evita que los residuos plásticos lleguen al mar
Puedes ayudar descartando la compra de productos de usar y tirar, reduciendo el plástico superfluo y depositando tus residuos en los contenedores adecuados.
Además, puedes firmar nuestra petición para que España dé un paso al frente y regule, por fin, la producción y uso de plásticos:
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No dejes basura en la playa y recógela cuando la encuentres
Cuando pases un día en el mar, además de la toalla y la sombrilla, recuerda llevar una bolsa para recoger tu basura y no dejarla en la arena. Y si encuentras latas, colillas o botellas, aunque no sean tuyas, retíralas también. ¡Cada pequeño gesto cuenta!
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Firma para exigir a los Gobiernos de Naciones Unidas una reunión de emergencia para aprobar por fin el Tratado Global de los Océanos. Si ya lo has hecho, por favor, comparte la petición:
