¿Qué estamos haciendo?

Para Greenpeace, la justicia climática y la paz en el mundo son objetivos que no pueden ir por separado. Por ello, decenas de personas voluntarias de nuestra organización han decidido salir a las calles de ciudades de todo el mundo. Han organizado manifestaciones que van desde protestas en kayaks o pequeñas embarcaciones frente a grandes buques de gas ruso hasta vigilias en multitud de ciudades. Además, hemos puesto en marcha una campaña de recogida de firmas para exigir a España una rápida transición hacia las energías renovables y para que abandone la idea de convertir nuestro país en el centro europeo del gas.

Aparte de la crisis medioambiental que trae consigo esta guerra, no nos olvidamos de la catástrofe humana. En el primer mes de contienda, más de tres millones y medio de personas se vieron obligadas a huir de Ucrania y casi siete millones más estaban desplazadas dentro del país. Aunque no tenemos oficina en Ucrania, estamos en contacto con personas dentro del país para saber qué recursos necesitan, y nuestras oficinas en países cercanos, como Polonia, Hungría, Eslovaquia, Bulgaria o Rumanía, están trabajando estrechamente con las ONG de ayuda humanitaria. Así, hemos cedido nuestras oficinas para que las entidades locales se coordinen y las usen como almacén; también estamos recopilando listados de personal médico e intérpretes que quieran asistir a las personas refugiadas. Queremos ayudar en todo lo que podamos y lo estamos haciendo desde las oficinas más próximas al conflicto. Estamos ahí, luchando por la defensa de la paz y el clima.