“Greenpeace es un continente flotante formado por buena gente”

Manoel Lopes se unió a Greenpeace poco después del nacimiento de la Comunidade Veciñal de Montes en Man Común de Teis (Vigo). Hace casi tres décadas, este grupo de vecinos empezó a reforestar un monte con especies autóctonas y, gracias a ellos, los ciervos y los halcones han vuelto a este entorno.

 

La Comunidade lleva 27 años reforestando un bosque con especies autóctonas. ¿Cómo ha sido esa experiencia?

Unas políticas desastrosas introdujeron especies alóctonas, como la acacia negra o el pino pinaster. Un grupo de vecinos nos unimos y ahora tenemos el control directo de la tierra. Creemos que el monte es para el disfrute de todos los seres vivos que lo habitan. Por eso, en lugar del modelo productivista clásico, que se basa en plantar eucalipto para vender la madera, impulsamos un trabajo de reestructuración.

¿Por qué es importante tener especies autóctonas?

No puede haber una sociedad sana en un medio enfermo. Restituir el bosque es un proceso de curación que da frutos: ya han vuelto animales como la gineta, el ciervo volante o el halcón peregrino. Pero requiere de un compromiso transgeneracional y yo, que tengo 52 años, seguramente no lo veré acabado. Aun así, es necesario que nos rasguemos las vestiduras, porque no podemos vivir en una península de monocultivos, sin reductos en los que la naturaleza se pueda expresar en libertad.

Premiasteis a Greenpeace por la ayuda prestada. ¿Por qué?

Pedimos a Greenpeace que viniera a vernos cuando la reforestación todavía era una idea. Y desde entonces hemos contado con vosotros. Queremos agradeceros muchas cosas, pero sobre todo la confianza. Por eso, una de nuestras parcelas se llama “Greenpeace”; ahora es un bosque de castaños, abedules, fresnos… Habéis sido un aliado incondicional y eso necesitaba un premio.

Hace más de 23 años que eres socio de Greenpeace. ¿Por qué nos escogiste?

Porque es importante la visión global para actuar localmente y no de forma abstracta. Yo quería estar conectado con una entidad que siempre da la cara y que me abría la puerta a una red global de gente que comparte pensamientos y corazón. Greenpeace es un continente flotante formado por buena gente, que entiende que el deshielo de los polos está conectado con Vigo.

 

Texto: Sandra Vicente, periodista