COP27: una de cal y otra de arena

Después de dos semanas de negociaciones, la COP27 se zanjó, al fin, con una buena noticia: la creación del fondo para “pérdidas y daños”. Es algo que se necesitaba desesperadamente para abordar los impactos climáticos que afectan a comunidades y países de todo el mundo, especialmente a los más vulnerables. Son los que más sufren las consecuencias de la crisis ambiental y los que menos responsabilidad han tenido en las emisiones de efecto invernadero, que son su principal causa.

La creación de este fondo, que habría sido imposible sin el trabajo de los movimientos sociales de todo el mundo, es la parte positiva de la COP, pero también ha habido malas noticias. Por ejemplo, no se logró acordar la eliminación gradual de los combustibles fósiles (gas, carbón y petróleo). A pesar de ser esta una necesidad urgente, no es de extrañar que no se haya llegado a un acuerdo: en las negociaciones había más de 600 personas acreditadas como representantes de países, pero que en realidad estaban vinculadas a la industria de los combustibles fósiles.

Las promesas del año pasado, que incluían presentar planes que impidan que la temperatura global aumente en más de 1,5 grados, no se han cumplido, además de otras cuestiones que también han quedado en el tintero. Con todo, la presión sobre la COP28 será enorme, porque nuestro planeta necesita respuestas inmediatas
y no vamos a rendirnos hasta conseguirlas.

Día del Voluntariado: ¡gracias!

El pasado 5 de diciembre celebramos el Día del Voluntariado, una jornada que conmemora el tiempo, la dedicación y el compromiso de todas las personas entregadas a una causa justa. Sabemos que no es fácil arañar horas a las jornadas maratonianas, ni algunos euros a las cuentas estresadas por la crisis. Pero aun así, estáis ahí.

Siempre hemos defendido la idea de que no hay acción pequeña y, por eso, en Greenpeace caben muchos tipos de voluntariado. Lo ejercen las personas que salen a la calle para recoger firmas y también las que se dedican al estudio y la divulgación sobre el medio ambiente. Nuestra misión sería impensable sin las personas que gestionan redes sociales o dan charlas y, por supuesto, sin las que ponen el cuerpo, e incluso arriesgan su libertad, para protestar contra quienes amenazan a nuestro ecosistema.

Como decimos, todas las acciones importan. Si tienes ganas de colaborar, pero no sabes cómo, únete a Greenwire, nuestra plataforma para conectar a la comunidad de voluntariado. Allí conocerás a personas como tú. Juntas, haréis grandes cosas.

Acciones, informes, reuniones de alto nivel, recogidas de firmas, investigaciones… Nada de esto sería posible sin vuestro esfuerzo. Una vez más, os damos las gracias por seguir construyendo esperanza. Gracias en nombre de Greenpeace y de nuestro planeta.

Únete aquí a nuestra red de voluntariado Greenwire.

Hecho para tirar: paremos el ultraconsumismo

El 25 de noviembre fue Black Friday, un día que incita a las compras irreflexivas que exponen el lado más salvaje del capitalismo y que agrava el estado de nuestro planeta. Comprar y regalar(nos) cosas bonitas o que necesitemos no es un problema si recurrimos al comercio justo, de proximidad y respetuoso con los derechos laborales; el conflicto está cuando las compras son impulsivas y nos rendimos a productos baratos pero de mala calidad, que deben ser repuestos cada poco.  

Desde Greenpeace apostamos por un consumo responsable y, por eso, bajo el lema ‘Hecho para tirar’, nos plantamos en el centro comercial de Madrid en pleno Black Friday. Instalamos cuatro montañas de residuos de varios metros de altura para denunciar el despilfarro
de recursos causados por las empresas. 

Uno de sus protagonistas es Shein. Greenpeace ha analizado decenas de prendas de esta marca. Hemos comprobado que el 15% contienen sustancias químicas peligrosas que superan los límites establecidos por la UE. La industria textil, liderada por la “moda rápida”, es responsable del 10% de las emisiones mundiales de carbono y del 20% de la contaminación de las aguas del planeta. Shein ha copiado de la mejor manera el peor ejemplo y fuerza la maquinaria al máximo: así como otras marcas generan colecciones nuevas cada mes, Shein apenas necesita tres días para sacar al mercado nuevos productos “hechos para tirar”.

guía de frutas y verduras de temporada: descARGA GRATUITA

El ritmo frenético de la agroindustria nos ha hecho olvidar los ritmos de la tierra. Para recordarlos, en Greenpeace te facilitamos La guía de frutas y verduras de temporada. Podrás ver que el otoño es época de espinacas, granadas o calabazas, mientras que el invierno trae alcachofas o naranjas. Además, descubrirás muchos productos menos conocidos, así como recetas, curiosidades y trucos para conservar los alimentos y hacer cocina de aprovechamiento.

Esta guía te dirá lo que produce la tierra en cada momento, pero eso no es suficiente para que tu carro de la compra sea sostenible. Es importante también consumir productos ecológicos, que eviten el uso de fertilizantes y plaguicidas sintéticos y respeten la naturaleza. Y también es esencial fijarse en el origen de los alimentos: de poco sirve consumir productos de temporada si, en lugar de ser de producción local, provienen de un país a miles de kilómetros de distancia.

En cualquier supermercado se pueden encontrar tomates, naranjas, fresas o judías verdes todo el año. O aguacates peruanos y bananas de Ecuador. Esto no es natural y además es muy perjudicial para el medio ambiente. Para conseguir esta producción desmedida y constante, se recurre a los invernaderos climatizados, al abuso de plaguicidas y otros productos químicos o a la importación desde países lejanos. Estas prácticas conllevan una enorme huella de carbono, destruyen los ecosistemas, tienen un enorme gasto energético y, en muchos casos, favorecen la explotación de personas. Por eso, desde Greenpeace, apoyamos al comercio local y sostenible

Descarga nuestra guía aquí.