‘Ecotopías’: el futuro de la humanidad y del planeta no es el que te cuentan las pelis

Parte de la portada del libro © Greenpeace

No resulta fácil creer que el mundo en el que vivimos podría salvarse y convertirse en algo mucho más vivible si nos quedamos solo con los titulares tremendistas de la prensa. La angustia por sentir que no hay salida para la catástrofe ecológica a la que nos enfrentamos puede convertirse incluso en un problema de salud mental —especialmente en los más jóvenes— que ya tiene nombre: ecoansiedad. Por eso resulta tan importante imaginar otros futuros posibles donde la vida es mucho más sostenible, hermosa y deseable.

“Quiénes nos dedicamos a intentar cambiar esta situación desde el activismo y la incidencia política sabemos que las alternativas son posibles y sabemos —porque lo hemos visto antes, como durante la pandemia— que las personas se unen para cambiar las cosas, para ayudar a otras”, explica Eva Saldaña, directora ejecutiva de Greenpeace España—. “Pero estos relatos más positivos, de esperanza, que muestran que el cambio es posible —y no solo posible, sino que nos hace más felices—, no son los relatos que nos rodean, salvo en contadísimas ocasiones. En la ficción, que es un reflejo de la sociedad, sobre todo las películas, las series, se centran más en los rasgos negativos (el fin del mundo, el apocalipsis, gente matándose por los últimos recursos disponibles…) y los hacen predominantes. Por eso solemos decir que es más fácil imaginar el fin del mundo que cambiar las cosas. Porque vivimos rodeadas de esas historias y cada vez más ese poso de pesimismo y de resignación va calando”.

Para demostrar que se puede hacer de otra, ha nacido Ecotopías, la novela gráfica que acabamos de publicar desde Greenpeace junto con la editorial Astiberri, y que es, en realidad, un proyecto colectivo en el que han participado ilustradoras, dibujantes y guionistas como Miguel Brieva, Darío Adanti, Flavita Banana, Harkaitz Cano, Iñaki Landa, Cristina Durán, Miguel Ángel Giner Bou, Núria Tamarit y Josune Urrutia. “El trabajo en torno a las ecotopías persigue precisamente lo contrario, sacar a la luz los rasgos positivos, los cambios que ya están en marcha, otras formas posibles de vivir, de juntarse para cambiar las cosas; y hacerlos predominantes en las imágenes que creamos sobre el futuro, hacerlos predominantes en nuestra imaginación porque son posibles. La imaginación se entrena. Pensar el futuro nos enseña a gestionar la incertidumbre”, comenta la directora ejecutiva.

“El concepto de Ecotopías se venía trabajando en distintos colectivos hace varios años —aclara Eva Saldaña—. En Greenpeace quisimos ponerle foco a esta línea de trabajo para impulsar la difusión de futuros esperanzadores frente a la ecoansiedad que se estaba extendiendo. Una de las iniciativas que llevamos a cabo dentro de la marca Ecotopías son los Diálogos Ecotópicos. Juntamos a artistas (del ámbito de la ilustración, la escritura, guionistas, etc.) con personas de colectivos que ya vivían en el presente de una manera esperanzadora. Y, de ese intercambio y debate, los artistas crearon piezas. Así nació la novela gráfica”. 

Ecotopías recopila un conjunto de relatos donde sus autores han buscado sacar a la luz los cambios que ya están en marcha, aunque la sociedad no los conoce. Bajo el punto de vista y el estilo personal de cada uno de los autores y autoras, todos los relatos parten de un diagnóstico compartido de la situación de crisis ecosocial en la que nos encontramos. A partir de ahí, se juega con el concepto de “el gran giro”, un término acuñado por la activista Joanna Macy en su libro Esperanza activa. Con él, Macy hacía hincapié en la necesidad de impulsar la transición de una sociedad de crecimiento industrial a otra que sustenta la vida y que la pone en el centro.

Eva Saldaña cree que Ecotopías no dejará indiferente a quien se acerque a sus páginas porque genera diálogo y provoca que nos hagamos preguntas. Quienes lo han creado, opina, “han visto ejemplos reales que cambian las reglas del juego. No se pueden expandir todavía porque el sistema es demasiado opresor, pero están cambiando completamente esas reglas del juego. Están revalorizando los cuidados, creando tiempo colectivo, generando inclusión, abrazando la diversidad… Son ideas que ponen lo común en el centro, que piensan más allá del crecimiento. Y las historias del cómic están consiguiendo que despierten algo”.
Portada libro Ecotopías

Texto: Mariángeles García